Tres crisis interconectadas -el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación- están poniendo en peligro el bienestar económico y social mundial. Socavan las oportunidades de reducir la pobreza y mejorar la vida, y complican la respuesta a la crisis por la COVID-19.

 

La Estrategia a Medio Plazo (EMP) es la visión del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) para 2022-2025 que pretende hacer frente al cambio climático, la pérdida de la naturaleza y la contaminación. La EMP articula el papel del PNUMA en el cumplimiento de las promesas de la Agenda 2030, así como de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible (Río+20) y su documento final, “El futuro que queremos”. La estrategia describe cómo el PNUMA reforzará la dimensión ambiental de la Agenda 2030 durante el período 2022-2025, apoyando a los países para que cumplan sus compromisos ambientales en virtud de los acuerdos internacionales.

 

El PNUMA impulsará acciones transformadoras de diferentes partes interesadas que aborden las causas del cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación. Al hacerlo, promoverá que la ciencia siga siendo el centro de los procesos de toma de decisiones, y de que el estado de derecho ambiental continúe sustentando la gobernanza ambiental mundial. El PNUMA impulsará los esfuerzos para utilizar las tecnologías digitales para obtener resultados inclusivos, transparentes e innovadores.

 

Reconociendo la complejidad y la interconexión del cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación, este emplea siete subprogramas de acción interconectados: Acción por el Clima, Acción por los Productos Químicos y la Contaminación, Acción por la Naturaleza, Política Científica, Gobernanza Ambiental, Transformaciones Financieras y Económicas y Transformaciones Digitales.

 

Con la quinta sesión de la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente que se celebra (en formato híbrido) en Nairobi del 28 de febrero al 2 de marzo de 2022, destacamos cuatro formas en las que el cambio climático y la contaminación química están interrelacionados:

 

  1. La contaminación química puede hacer aún más vulnerables a las especies que ya tienen dificultades debido al cambio climático;
  2. El cambio climático podría aumentar los impactos de la contaminación química;
  3. El cambio climático está amplificando la liberación de sustancias químicas peligrosas en el medio ambiente;
  4. La industria química en diversos países es responsable de altos niveles de emisiones de gases de efecto invernadero.