El suelo, uno de los componentes esenciales de la tierra, es un elemento muy complejo y a menudo infravalorado.La contaminación del suelo es uno de los aspectos mas olvidados cuando hablamos de los impactos de las alteraciones del medio ambiente en la salud. Las zonas urbanas de Europa están creciendo, a menudo a expensas de las tierras agrícolas fértiles. Las superficies de asfalto sellan el suelo , impidiéndole realizar sus funciones como almacenar agua, producir alimentos y biomasa, regular el clima, amortiguar los productos químicos nocivos y proporcionar hábitats.

La forma en que usamos la tierra y el suelo también está directamente relacionada con el cambio climático . El suelo contiene cantidades significativas de carbono y nitrógeno, que pueden liberarse a la atmósfera dependiendo de cómo usemos la tierra

La manera en que construimos y conectamos las ciudades no debería implicar cubrir las áreas circundantes con concreto y asfalto, sino que debería basarse en la reutilización y la reutilización de las tierras ya ocupadas. De hecho, un informe de IPBES (Plataforma Intergubernamental de Ciencia-Política sobre Servicios de Biodiversidad y Ecosistemas) afirma que es más barato preservar la tierra y los recursos del suelo que restaurarlos o remediarlos (por ejemplo, limpiando tierras contaminadas en antiguas instalaciones industriales)