Los espacios públicos de una ciudad pueden ser evaluados por la ciudadanía gracias a una herramienta basada en tecnologías de la información que ha sido desarrollada por la fundación Tecnalia. Dicha herramienta, CITIZENSOR, permite que la ciudadanía realice observaciones de los espacios públicos de su ciudad y valore su calidad en términos del confort ambiental que le aporta.
Podemos recoger y compartir información subjetiva y objetiva de los espacios urbanos mediante un teléfono inteligente, conectado a sensores calibrados. Durante la visita a los lugares evaluados captamos datos de las condiciones ambientales (condiciones térmicas, acústicas y elementos visuales), y estos datos objetivos se enriquecen con datos subjetivos respecto a cómo percibimos el espacio y qué efectos tiene sobre nuestro bienestar: el paisaje, el confort acústico y la sensación térmica.
La aplicación nos guía en la observación y ofrece en el teléfono un resumen de los resultados, mediante indicadores de confort. En el proyecto europeo CITI-SENSE se invitó a 55 personas voluntarias de Vitoria-Gasteiz a utilizar el observatorio ciudadano de espacios públicos para evaluar 4 emplazamientos de su ciudad. Al finalizar la experiencia valoraron positivamente la iniciativa porque les permitió descubrir aspectos novedosos de los espacios en los que hicieron observaciones y afirmaron que la aplicación de este tipo de herramientas en casos reales ayudaría a mejorar su ciudad con la participación ciudadana (www.youtube.com/watch?v=cgDO3z9B3Kc).
Los datos recogidos se enviaron a la plataforma del observatorio y en la web http://vitoria.citi-sense.eu se pueden consultar las valoraciones realizadas. El conjunto de las evaluaciones permite realizar un análisis de las condiciones de calidad ambiental de cada espacio y también compararlos. En este sentido, se han encontrado evidencias de que la estancia en espacios con presencia de elementos naturales tiene efectos positivos en la salud percibida por las personas que los visitan: reducción de su nivel de estrés, aumento de sus emociones positivas y reducción de las negativas.
Este observatorio ciudadano, testado en condiciones reales, puede formar parte de iniciativas de empoderamiento ciudadano en los procesos de gestión de espacios urbanos. Las autoridades municipales recibirían información novedosa y facilitaría el diálogo entre la ciudadanía y los gestores municipales.
Así, la evaluación realizada puede ser la base para que la ciudadanía comparta y proponga ideas para la mejora y preservación de espacios públicos de su ciudad, y puede facilitar procesos participativos de co-diseño asociados a los planes y proyectos de remodelación urbana de espacios concretos.
Autoras: Itziar Aspuru e Igone García, investigadoras de Fundación Tecnalia Research & Innovation.