La relación entre la salud infantil, el bienestar y la educación demuestra que los niños más saludables y felices alcanzan un nivel educativo más alto. Esto afirma un estudio realizado en la Universidad de Swansea (Reino Unido) y que ha sido publicado en la revista ‘Plos One’, donde el objetivo del estudio ha sido el conocer la opinión y experiencia de docentes y alumnado de un programa de aprendizaje al aire libre dentro del plan de estudios en edades 9-11 años en el sur de Gales, Reino Unido.

Los hallazgos son relevantes a nivel mundial ya que las oportunidades para que el alumnado acceda al medio ambiente natural están disminuyendo. De hecho, cada vez pasan menos tiempo fuera debido a la seguridad, el tráfico, la delincuencia y las preocupaciones de los padres.

El estudio pone de manifiesto que el entorno escolar brinda la oportunidad de ofrecer un plan de estudios que involucre al alumnado para alcanzar su potencial académico y definir sus resultados de salud futuros y su camino socioeconómico, reduciendo las desigualdades en salud y educación. Sin embargo, con las escuelas que actualmente enfrentan una multitud de presiones externas de arriba hacia abajo en el logro educativo y las desigualdades en salud y bienestar, existe la necesidad de experiencias de aprendizaje que mejoren simultáneamente la salud, el bienestar y la participación escolar al mismo tiempo que abordan las necesidades curriculares.

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