El verano es época de incendios. Y también de calor. Sin embargo, desde hace años, el verano se ha convertido en escenario de temperaturas cada más elevadas en forma de olas de calor y noches tropicales y de incendios más pavorosos.
Son fenómenos que se están agravando por el cambio climático, según publicaba el organismo de Naciones Unidas dedicado al cambio climático, el IPCC, en su último informe, donde entre otra evidencia, señalaba la relación entre la elevación de la temperatura media global y los llamados “megaincendios”.

Además de los efectos más visibles sobre el medio como la pérdida de patrimonio natural o agrícola, la muerte de fauna y ganado, la contaminación del aire y el agua por la ceniza y la erosión, la pérdida de viviendas, recursos y vidas humanas, los incendios tienen efectos sobre la salud pública.

Los recogemos en la Guía OSMAN “Incendios forestales y salud pública”, disponible para descarga gratuita en pdf “aquí” https://www.osman.es/project/incendios-forestales-efectos-en-salud-publica/