El último miércoles de cada mes de Abril se celebra cada año el día mundial de concienciación sobre el ruido.

El ruido es un sonido no deseado, recogiendo su propia definición una componente de molestia. En entornos urbanos nos rodea sin cesar día y noche, superando los límites recomendados por la Organización Mundial de la Salud. Porque sí, el ruido tiene efectos sobre nuestra salud.

Según un informe recientemente publicado por la Agencia Europea de Medio Ambiente, el tráfico constituye la principal fuente de ruido y dentro de este, el transporte por carretera es la principal causa. Sobrepasa el umbral de 55 decibelios (dB) de exposición diaria y 50 dB de exposición nocturna. En los 33 países de la Unión Europea, más de 100 millones de personas están expuestas a niveles superiores a 55dB y de estos, 32 millones a niveles muy altos, superiores a 65 dB. Otras fuentes de ruido son los ferrocarriles, aeropuertos e industrias (Managing exposure to noise in Europe).

Según la OMS, el ruido es por detrás de la contaminación del aire, el estresor ambiental más importante en Europa.

En la guía Osman “Ruido y Salud”, que está disponible para descarga gratuita en nuestra web , se recogen los principales efectos que el ruido tiene sobre nuestra salud. Además de la molestia y el estrés, puede perturbar el sueño y provocar toda una serie de impactos como enfermedad cardiovascular, hipertensión, disfunción cognitiva y de aprendizaje, etc.

Conseguir niveles más bajos de ruido en el entorno en que vivimos es fundamental para nuestra salud.