Según recoge El País, en las últimas semanas se han registrado niveles nunca vistos de CO2. Esto junto al movimiento ciudadano en las calles de grandes ciudades a nivel mundial, ha provocado  que algunos gobiernos nacionales y regionales declaren una emergencia climática (Reino Unido, Irlanda, Escocia, Cataluña).

Aunque sea una declaración simbólica, es cierto que constituye un primer paso y aunque desde el OSMAN apoyamos los movimientos que reclaman el pasar a la acción y tomar medidas concretas y efectivas contra el calentamiento global, consideramos una medida importante para transmitir la urgencia del problema.

 

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